Un portátil de pantalla flexible: Lenovo quiere revolucionar la informática

Esta semana Lenovo ha presentado en Nueva York las novedades de la compañía al tiempo que ha apuntado cómo serán las tendencias del futuro en la computación portátil. En concreto, la compañía explicó cómo contempla que puede ser el Thinkpad de los próximos años: un portátil ultraportable, con pantalla plegable y siempre conectado.

El concepto de Lenovo cree que la bisagra en los ordenadores ha quedado obsoleta y que el futuro pasa por la incorporación de unas pantallas flexibles con tanta capacidad que se puedan cerrar por completo para llevar a cualquier lado. La apuesta por este tipo de pantallas permitiría además aprovechar más el espacio y tener más superficie sin incrementar el tamaño del dispositivo.

Aunque la compañía apostaría por nuevos materiales para desarrollar este concepto, desde Lenovo no se aventuraron a detallar cuáles serían exactamente los elementos que emplearía para lograr una flexibilidad, durabilidad y solidez en un equipo pensado para llevar a cualquier lugar.

De momento LG y Samsung han presentado pantallas capaces de doblarse y retomar su posición inicial, sin embargo, todavía se encuentran en una fase muy inicial como para llegar a convertirse en un producto de masas. Es por ello que Lenovo apunta a este posible portátil de momento como un mero concepto.

Una relación distinta con el portátil

Más allá de los materiales empleados, desde la compañía explican que el comportamiento de los usuarios con el portátil ha cambiado, es por ello que explican que el ultrabook del futuro tiene que ser capaz de responder a múltiples formas de relacionarse con el usuario.

En concreto, Lenovo muestra en el diagrama que el equipo reconocerá tanto la voz como la escritura a través de un lápiz. Ambas tecnologías se encuentran ya en diferentes equipos de varios sistemas operativos, con lo que se entiende que el concepto de la compañía china sería mejorar los sistemas actuales.

Asimismo el concepto de la empresa sigue apostando por la incorporación de ratón y teclado, que todavía seguiría siendo la forma de entrada de información predilecta, especialmente hacia el público que se orienta Lenovo, un perfil más corporativo y profesional.

Lenovo lanza el ThinkPad edición 25 aniversario con el clásico TrackPoint

Para muchos el IBM ThinkPad es uno de los iconos más valorados de los comienzos de la informática, incluso por un diminuto punto rojo que se convirtió durante años en una interesante alternativa al ratón. Ahora Lenovo ha lanzado el ThinkPad edición 25 aniversario, evocando a aquel importante portátil de IBM que marcó una época.

Hace 25 años tener un ordenador portátil era algo similar a la ciencia ficción, y aquellos que poseían uno debían pagar altos precios por ellos, de entre 500.000 y 800.000 pesetas, algo así como 3.000 o 5.000 euros hoy. Hoy Lenovo por una quinta parte de este precio ofrece unos portátiles tan espectaculares como el Yoga 920, que hemos podido probar y daros nuestras primeras impresiones.

ThinkPad edición 25 aniversario, aspecto retro con nuevo hardware

Eso es lo que nos ofrece este Lenovo ThinkPad edición 25 aniversario, que como principal guiño al pasado integra en el centro del teclado un TrackPoint de color rojo, que como sabéis era como un pequeño punto que podíamos mover con nuestro dedo para desplazar el puntero por la pantalla, cuando por entonces no existían los pad táctiles, del que por cierto sí disfruta este modelo. Además cuenta con la tecla de Enter de color azul clásica, así como el logo de ThinkPad original y varios LED de estado.

ThinkPad edición 25 aniversario

Por supuesto el diseño exterior es calcado al del modelo original, basado en el diseño japonés Bento Box, aunque si miramos en su interior, podemos darnos cuenta de que se trata de un auténtico portátil de nuestros días. Porque ofrece un procesador Intel Core i7 de séptima generación, así como 16GB de memoria RAM y un almacenamiento interno de 512GB SSD. La tarjeta gráfica es una Nvidia 940MX. También cuenta con conectividad USB Tipo C (Thunderbolt 3), otros tres puertos USB tradicionales, puerto HDMI, lector de tarjetas SD y conector de red.

ThinkPad edición 25 aniversario

Además cuenta con un lector de huellas que nos permite identificarnos en Windows 10 con Windows Hello. Como es lógico, no se trata de un portátil barato, teniendo en cuenta su hardware de primera, que se trata de una edición limitada y de su recreación clásica externa, este ThinkPad edición 25 aniversario se ha puesto a la venta en Estados Unidos a un precio de 1899 dólares. Sin duda se trata de un edición muy atractiva este ThinkPad edición 25 aniversario, sobre todo por la atractiva mezcla de un look retro con un hardware de auténtico tope de gama.

El portátil del futuro

La superficie táctil que sustituye el teclado del Lenovo Yoga Book permite escribir, dibujar y digitalizar todo tipo de contenidos

Lenovo Yoga Book fue uno de los dispositivos que despertó mayor admiración de los asistentes a la pasada feria IFA de Berlín. Disponible ya en nuestro país, podría describirse como un equipo 2 en 1 a medio camino entre un portátil y un tablet, con el diseño compacto de un ultrabook y la funcionalidad de una tableta gráfica. Suena complicado, pero no lo es tanto: la clave ha sido eliminar el teclado físico y optar en su lugar por una superficie táctil multiusos.

FICHA TÉCNICA

Pantalla: IPS Full HD de 10,1″ (1.920 x 1.200 píxeles de resolución)

Procesador: Intel Atom x 5-Z8550 (caché de 2 M, Quad Core, hasta 2,4 GHz)

Memoria RAM: 4 Gb

Almacenamiento: 64 Gb / Ranura para microSD hasta 128 Gb

Tecnología táctil: En pantalla tecnología táctil capacitativa con AnyPen; Create Pad con tecnología táctil capacitiva y EMR Pen

Batería: 8500 mAh; autonomía en espera de más de 70 días y 13 horas en uso

Sistema operativo: Android 6.0

Tamaño: 256,6 x 9,6 x 170,8 mm

Peso: 690 g

Red: 4G LTE, 3G HSPA+, 2 GSM

Conectividad: Wi-Fi 802.11 a/b/g/n/ac, Bluetooth 4.0

Sensores: Vibración, G, luz ambiental, hall y GPS

Cámaras: Trasera de 8 megapíxeles con enfoque automático; frontal de 2 megapíxeles

Otros: Dolby Audio Premium, ranura para tarjetas nanoSIM

Yoga Book atrae la atención desde la primera mirada. Con una pantalla de 10,1 pulgadas, es realmente fino (unos 9,6 milímetros) y ligero (690 gramos) y resulta comodísimo llevarlo en un bolso, mochila o en la mano. También destacan los materiales con los que se ha fabricado, entre los que se encuentran una combinación de aleaciones de magnesio y aluminio que aportan resistencia y acabado premium.

Pantalla y superficie táctil están unidas por la bisagra característica de los convertibles de Lenovo, que hace posible situarlas en cualquier ángulo: desde cerradas para guardarlo y transportarlo cómodamente, hasta abiertas como si fuera un ordenador portátil, pasando por el formato tienda de campaña para consumir contenidos multimedia o plegadas 360º para usar el dispositivo como una tableta. En este caso, la bisagra es más fina de lo habitual, con tres ejes y hasta 130 piezas mecánicas diferentes compuestas de cinco materiales distintos, que consiguen que el cambio de posiciones resulte muy fluido. Cuando el equipo está cerrado se echa en falta algún tipo de pestaña o tirador para abrirlo, ya que es una tarea bastante tediosa en la que es obligatorio emplear ambas manos.

El verdadero efecto sorpresa se produce cuando se enciende el equipo, y la superficie táctil — el auténtico atractivo del Yoga Book — muestra un teclado virtual retroiluminado denominado Halo: utilizarlo en lugar de uno físico tradicional es una de las principales razones por las que es tan compacto. Lo más interesante es que integra un software capaz de aprender cómo tecleamos y corregir automáticamente los textos. Un ejemplo: cada persona pulsa las letras o números en un punto concreto, que puede ser el centro o cualquiera de los laterales, y eso provoca errores al teclear. Puede corregirse si el teclado se adapta a nuestros hábitos de escritura, como en este caso, aunque este aprendizaje es progresivo y son necesarias muchas horas de uso para notar un cambio real.

El teclado es amplio, muy sensible y ofrece feedback a través de una sutil vibración para que seamos conscientes de estar pulsando las teclas correspondientes. Su uso es más cómodo que el teclado virtual de las pantallas táctiles, pero las sensaciones y la rapidez de escritura no terminan de ajustarse a las que se obtienen con uno físico. Además, el trackpad es bastante pequeño y está muy cerca de la barra de espacio, por lo que se pulsa muchas veces sin querer.

Por supuesto, y siguiendo la línea de los teclados de los equipos 2 en 1 que habíamos visto hasta ahora, se desactiva automáticamente al pasar a modos como el de tableta o tienda de campaña, en los que podría pulsarse de forma accidental. También puede desactivarse de modo manual con un fin adicional: transformar la superficie táctil en un cuaderno digital del mismo estilo que las tabletas digitalizadoras de Wacom; firma que ha colaborado en su creación. Hacerlo es tan sencillo como pulsar sobre el icono de un bolígrafo que aparece siempre fijo en la parte superior del y en la pantalla. Aquí entra en acción el stylus que incluye el Yoga Book de serie. Posee un tamaño similar al de un bolígrafo tradicional y cuenta con la tecnología Wacom feel para conseguir que sea más sensible y preciso, además de admitir hasta 2.048 niveles de presión y detectar ángulos de 100 grados. Y lo que es más importante, no utiliza pilas ni batería, por lo que no es necesario recargarlo. Combinado con la aplicación Note Saver, todos los textos, ilustraciones o garabatos quedan digitalizados y almacenados en notas independientes, organizadas por cuadernos, editables y con la capacidad para compartirse.

Un detalle adicional: la punta del stylus puede sustituirse por una con tinta. Así, cuando se coloca un papel sobre la superficie táctil, es posible dibujar o escribir con tinta a la vez que estas creaciones se guardan automáticamente dentro de la aplicación de notas. Lo único negativo que podemos decir al respecto es que el cambio de las puntas no es sencillo (implica utilizar la tapa del bolígrafo para sacar la instalada) y que se corre el riesgo de que se olvide poner la digital de vuelta y se pinte accidentalmente el dispositivo.

Android o Windows

El Yoga Book está disponible con sistema operativo Windows (599 euros) o con Android (499 euros); este último, el modelo que hemos tenido la oportunidad de probar. Basado en la versión 6.0, y sin confirmación sobre si actualizará a Android 7.0, dispone de una interfaz personalizada para añadir funcionalidades más propias de un PC, como admitir atajos de teclado o la opción multitarea, aunque presenta restricciones: no funciona con aplicaciones tan populares como Google Search, Docs, YouTube o Twitter, por citar algunos ejemplos. La aportación más útil a nuestro juicio es una barra de tareas inferior en la que aparecen minimizadas las aplicaciones abiertas para que se pueda acceder a ellas de forma inmediata.

Funciona de forma fluida, aunque debido a su configuración no se le puede exigir demasiado en términos de rendimiento o gráficos: un procesador Intel Atom X5 con 4 Gb de memoria RAM. Para un usuario medio resulta suficiente. Incorporar este procesador tiene beneficios a nivel de eficiencia energética, y este dispositivo ofrece una autonomía estimada por Lenovo de alrededor de 13 horas, que se sitúan en algo más de una jornada completa de trabajo con un uso real y variado. Luego, se recarga a través de microUSB (nada de USB tipo C), al que acompaña un puerto microHDMI.